POLÍTICOS Y POLÍTICAS QUE DEGRADAN EL ESPÍRITU

La desestructuración de la sociedad actual es cada vez mas evidente y de ello nos apercibimos en las desigualdades  entre las  capas sociales,cada vez se abre mas brecha entre países ricos y pobres o entre norte y sur, y en los últimos años debido a la crisis mundial incluso la diferencia también de clases en los países que se consideran desarrollados ocurre,estamos en un retroceso evidente en todos los aspectos humano,social y por último espiritual.
Escasean los buenos políticos esos hombres y mujeres que trabajan por un bien común, podríamos declararlos casi en extinción si no fuese por casos aislados como el ex-presidente de Uruguay José Mujica un hombre modesto que trabajó para su país con una humildad desconocida en la élite política.
No quiero extenderme mucho sobre estos temas políticos porque este es un blog de crecimiento espíritual o por lo menos eso pretende ser ,aunque la referencia a este hombre la hago casi como una excepción por méritos propios,el ejemplo de que los políticos pueden  trabajar en la humildad es posible pero hay un obstáculo muy grande para ello es el poder que casi siempre corroe y hace del ser humano un egocéntrico sin humanidad.
Tenemos pruebas en la historia de que esto siempre fue así, y los poderosos soliviantaron y humillaron a los pueblos exclavizandolos  a veces con doctrinas absurdas y creencias incoherentes,hoy en día cambíó las formas en algunos lugares del mundo pero no los conceptos, en buena parte del mundo las ideas y costumbres barbaras quedaron ancladas para no avanzar en un progreso que es inevitable son los países que padecen conflictos bélicos,hambrunas,epidemias y dentro de los países que se consideran desarrollados esto ocurre pero sutilmente, ejemplos los desahucios de familias en fin los recortes sociales en lineas generales.

La política debería ser la solución para los problemas de la sociedad pero es todo lo contrario degrada al ser humano a la escala mas baja del sufrimiento mientras los poderosos ven llover desde su ventana en una cálida habitación del hotel mas lujoso,pensando en como recaudar el próximo impuesto que impulse su avaros conceptos de gobernar,liquidar al ciudadano como tal,destruir los derechos de todo ser humano a una vida feliz es el cometido del político del presente.
Nos envuelven en ideas obscena de crecimiento económico que no son reales,nos inculcan la idea de una sociedad rica a costa de lo que sea y de quién sea esto es un error gravísimo que nos llevará al desastre  económico y social definitivo.
Todo lo que no inculque igualdad y justicia tarde o temprano se derrumba por eso es muy importante la educación espiritual desde la base y los conceptos de tolerancia entre pueblos es vital para  reencontrarnos con nuestra energía primaria que es el amor,tan ausente en estos tiempos.
Los propios políticos son reos de sus falsas creencias y ellos mismos están equivocados al abordar los problemas del mundo desde un prisma individual cuando la verdadera  fuerza es el colectivo o la unión de la energía en un solo corazón. La idea de países y fronteras caerá en desuso en no muy poco tiempo porque no tendrá razón de ser en un mundo con una economía fracasada como la actual.
Destruimos nuestra casa que es nuestro planeta y ese será uno de los pilares estructurales para que se tenga que cambiar la situación económica caótica a la que nos dirigimos,y tiene que ser antes de que ya el reloj se pare para no volver a ponerse en marcha es inconcebible que una política mal dirigida haga prevalecer la economía por encima de nuestro propio hábitat,realmente está fuera de todo conocimiento inteligente y de una falta de sentido común el que esto sea así.

Hagamos algo por nosotros mismos ayudando al planeta y a nuestros hermanos a corregir errores antes de que sea tarde, transmitamos los conceptos de la tolerancia y el amor desde la infancia a los nuevos espíritus que se encarnan en la tierra,la violencia suele ser un concepto aprendido y de ella emanan las desigualdades,atajemos los conductos de los desagravios instruyendo en el amor incondicional al necesitado de verdad.
Una nueva sociedad es posible mediante una revolución pacífica, la enseñanza espiritual.