AFINIDAD ESPIRITUAL. SUFRIMIENTO O FELICIDAD

Para entender este artículo tenemos que expandir la mente hacia la realidad eterna del espíritu, somos espíritus libres dueños de nuestras acciones por lo tanto escogemos el camino que queremos seguir, nuestro viaje es eterno y vida tras vida aprendemos lecciones que nos sirve para el progreso espiritual y para comprender quienes somos. Todo está dirigido para una sola realidad el amor, ignorar este fin amoroso es lo que construye nuestro sufrimiento, sin amor no hay felicidad es una evidencia indiscutible.
Un daño a un semejante en esta vida es una deuda a pagar en la próxima encarnación y muchas de esas duras pruebas pasan por la convivencia con personas que nos hacen de algún modo sufrir muchos de esos sufrimientos llegan a ser auténticas torturas para el que la sufre, por eso debemos ser consciente que todo los que nos sucede es el pago por nuestros malas acciones en vidas pasadas, sufrir en nuestras propias carnes el dolor para aprender a no causar daño a ningún ser, RESPETAR a todos seres es la lección última y último fin para regresar al camino de la luz donde el amor domina los sentimientos.
La reencarnación es la mas justa y dura prueba  a la que todos los espíritus nos tenemos que enfrentar  y es muy importante no entender ese dolor, como algo injusto si no mas bien como una lección justa que nos llevará finalmente a la comprensión de las leyes del amor para liberarnos al fin de la rueda de la reencarnación y ser libres en el amor de DIOS o de la luz amorosa.
               

                              Desde el momento  de que un espíritu empieza a ser consciente de esta realidad,las leyes morales de su existencia cambian porque sabe perfectamente que hacer las cosas bien hoy es menos sufrimiento para el mañana, las deudas del espíritu siempre se pagan pero ese pago no es un castigo mas bien una lección de aprendizaje y comprensión, hay que entender que la luz se compone de pura energía amorosa por lo tanto nunca crea dolor eterno ni sufrimiento gratuito.
La oscuridad es incompatible con el amor por esa razón fundamental no podemos gozar de la felicidad absoluta, hasta que no se elimine la oscuridad de nuestro espíritu y de nuestra razón no encontraremos la liberación total del espíritu.
La mayoría de personas que se cruzan en nuestro camino no suele ser por casualidad realmente siempre tenemos algo que aprender de todos y cada uno de esas personas, de las experiencias malas hay que sacar la parte positiva esa que nos hace mas sabio de espíritu y de las buenas experiencias hay que disfrutarlas al máximo porque ese es el resultado de haber realzado bien las cosas en otro momento.
Espero que reflexionen sobre este asunto y se propongan desde este momento ser mejores espíritus y existir en armonía con el amor, el premio es la felicidad eterna del espíritu.