LA LUZ QUE ILUMINA LA OSCURIDAD

Vivimos  unos tiempos muy oscuros, estamos alejados de nuestro origen que es el amor, toda esta oscuridad se refleja por ejemplo en las políticas egoístas de los países que solo piensan en su `propio desarrollo abandonando a otros países pobres a su suerte. La oscuridad también está cada espíritu que da la espalda a cualquier situación de injusticia haciéndose cómplice de dicha situación injusta.

Da igual que creas en Dios o no creas eso es indiferente a la luz del amor, Dios te amará de la misma forma si entregas felicidad al que sufre de tristeza y das pan al que tiene hambre,si das agua al sediento. Se trata de actos buenos no de creencias,yo si creo en Dios y a ti que ahora secas las lágrimas del desfavorecido , obtendrás la recompensa de la luz eterna al otro lado.

Me considero un humilde  obrero de la luz que considera que no se debe dejar de hacer las cosas buenas para mas tarde las acciones tienen que ser ahora,el auxilio es un deber de todos los que quieren ser recogidos por el amor cuando pasen el trance de la vida actual.

El mas rico de los ricos tiene el corazón generoso, educa al ignorante, calienta la comida al hambriento que sufre de soledad, construye puentes para que pasen los mas retrasados.

Si fuésemos conscientes de lo corto que es el instante de la vida terrenal, si despertáramos del sueño en el que estamos en la vida, nos volveríamos altruistas por naturaleza, para aquellos que acumulan riquezas de una forma desenfrenada y solo viven para guardar las riquezas en una caja de seguridad,le aseguro que cuando abandone la vida sufrirá las mayores de las pobrezas, la espiritual, Quedará en la soledad mas absoluta con su consciencia.

En publicaciones futuras explicaré porque afirmo que esto es así, pero mi convencimiento de lo que escribo es total, me considero un filósofo de la vida y médium siempre trabajé para los necesitados desde el anonimato y jamás cobré por el regalo que Dios me dió. Los trabajadores de la luz nunca deben poner precio a su labor de amor,Dios regala el don para que luz alcance a los necesitados.

Estamos espiritualmente ciegos, hundidos en el consumismo más corrosivo, sin pensar en los que mas nos necesitan, con esta forma de vivir nos alejamos del amor, nos hundimos en el fango del egoísmo cayendo en sueño de la falsa felicidad.

Para los que aman a Dios y a la luz nos cuesta trabajo caminar viendo tanto sufrimiento por todos lados,esas imágenes nos rompen al alma,pero por otro lado hay que ser fuerte para entregar esa fortaleza a los débiles, por ese motivo creo que algunos vienen a la tierra, para secar las lágrimas de los que sufren.